MADRID, 9 DE SEPTIEMBRE. LA HUELGA GENERAL ESTÁ ASEGURADA.

El 9 de septiembre el SOT-UGT estuvo en la plaza de toros de Vista Alegre para participar, junto a miles de delgados/as de todo el Estado español, en el pistoletazo de salida de la Huelga General.
Desde nuestra Unión salió un autocar lleno con una variada representación de todos los sindicatos, que se completó con algunos compañeros/as de la Unió de Osona y de la FeS de Girona. El éxito parecía asegurado visto el enorme trasiego de autocares de todos los lados que se veían por el camino, pero las espectativas fueron superadas de largo, una vez que llegamos a Carabanchel sobre las nueve de la mañana entre un rugir ensordecedor de autocares por todos los lados, y la ocupación masiva de las calles aledañas por una marea de compañeros/as con todas las banderas que confluían hasta el coliseo madrileño.
Hacía las once de la mañana, la aglomeración en la entrada sur era tremenda y se accedía muy a poco a poco. Medía hora después la plaza estaba llena y se cerraban las puertas. Unas tres mil personas quedaban fuera, según se comentaba por los pasillos. Adentro más de 15.000 en unas gradas empinadas y unas butacas muy justitas de espacio. El mitin estuvo bien plateado y no se alargó en exceso. Ejerció de conductora la actriz Petra Martínez, visiblemente nerviosa pero con un discurso calculadamante reivindicativo que iba entreteniendo y envalentonando a las gradas a partes iguales. Cantó Pedro Guerra; cuatro canciones auque sólo su canción más conocida Contamíname, pareció venir a cuento.
Tras los teloneros, las intervenciones. La del secretario General de la CES, deslucida y fría por la intervención en inglés y las constantes pausas para su traducción leída por una traductora. Las secretarias de juventud de los dos sindicatos leyeron de manera conjunta -y entre muestras de afecto y compañerismo- el manifiesto de la huelga, en un ejercicio muy necesario para las dos aficiones -valga el símil- que no se mezclaban ni para entrar en la plaza en medio del tumulto.
Las intervenciones de los líderes sindicales empezaron sobre las 13 horas de la tarde. Intervino primero Cándido Méndez y cerró Toxo. Ámbas intervenciones fueron brillantes, aunque a este cronista le sobró reitaración sobre las causas y génesis de la crisis y la faltó un tono más mitinero sobre las secuelas que traerá la reforma laboral y la movilización de la huelga. En este sentido estuvo mucho más acertado Cándido Méndez -no es que seamos caseros- que se centró más en los motivos por los que los/as trabajadores/as tenían que apoyar el paro y lanzó los mensajes más duros al gobierno, indicando que los trabajadores votábamos y nos pensaríamos mucho a quien votábamos en las próximas elecciones; huelga decir que ese momento los gritos de Zapatero dimisión! sonaban al unísono en toda la plaza. Tuvo detalles acertados, como la solidaridad con los mineros del Carbón encerrados en las minas del norte, o la apelación a todos los funcionarios con los sueldos recortados. Toxo también estuvo bien y lo mejor fue que cerrara al grito de viva la lucha de la clase obrera y viva la huelga general.
Dado que de manera excepcional y sin que sirva de precedente me atribuyo el papel de cronista no quiero acabar el post sin explicar la enorme fascinación que nos produjo la marea de banderas y de colores de la concentración. Entendimos allí mismo que era la primera batalla ganada de esta huelga -y así de duros reaccionaron los periódicos fascistas de Madrid al día siguiente-y que esta gran demostración de fuerzas, iba a romper la espiral de la autoprofecia que se cumple.
A todos/as los que nos dimos cita en Carabanchel el pasado miércoles, ánimo que todavía nos queda mucho trabajo para que el 29-S sea el éxito que ya se apunta.